A través de un parte de prensa, la Policía de Bolívar brindó información acerca de una serie de operativos que se llevó adelante en las distintas localidades del distrito, tanto en lo que respecta al control del tránsito como también delitos y faltas en general. Qué pasó el fin de semana en la ciudad cabecera, Urdampilleta y Pirovano.

Agentes de la fuerza de seguridad se desplegaron durante los días sábado y domingo para continuar con operativos coordinados con la Dirección municipal de Protección Ciudadana, cuyos resultados han sido informados como positivos por la propia policía. En estos casos, tienen que ver con controles de tránsito, ya sean vehículos o personas, en los accesos a las localidades.

En ese marco, los uniformados llevaron adelante secuestros de dos ciclomotores debido a que faltaban a la norma establecida y sus conductores recibieron actas de infracción que tramitan ahora en el Juzgado de Faltas.

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Por otra parte, la policía informó que los oficiales afectados al operativo en la localidad de Ibarra labraron una infracción a un transportista por circular con hacienda en días de lluvia, lo que provocaba deterioro en los caminos rurales transitados.

Finalmente, se conoció que el personal del destacamento de Pirovano labró una infracción a una mujer mayor de edad por provocar disturbios e incitar a la pelea en la vía pública a otra vecina de la localidad. En este caso, tomó intervención del Juzgado de Paz a cargo del Doctor Atilio Franco.

Nuevas disposiciones

La Policía Departamental de Bolívar había informado semanas atrás la implementación de nuevas disposiciones de seguridad consensuadas con el área de Protección Ciudadana municipal, a través de las cuales comenzaron a realizarse controles intensivos.

Los operativos que llevan a cabo las diferentes dependencias subordinadas por la departamental constan de controles de interceptación selectiva de vehículos y personas.

Según precisaron, hay dos tipos de controles. Por un lado, operativos en los ingresos a las localidades, a fines de prevenir delitos y faltas de tránsito en general; mientras que en los ejidos urbanos se trata de ordenar el tránsito.