El Senado bonaerense se aprestaba el pasado miércoles a tratar el proyecto de ley enviado por el gobernador, Axel Kicillof, para permitirle a la Provincia acceder a un financiamiento por $53.000 millones de pesos. Sin embargo, la sesión se terminó cayendo por falta de acuerdo entre los bloques legislativos aunque muchos apuntan a una tensión interna en Juntos por el Cambio.

Según la información difundida por varios portales, en particular Diputados Bonaerenses especializado en la política parlamentaria, la sesión fue suspendida por la resistencia que ofrecieron los intendentes de Juntos por el Cambio y la interna existente dentro de la dirigencia del PRO luego del triunfo de Javier Milei en el balotaje presidencial, lo que está produciendo un reacomodamiento en la que hasta no hace mucho fue la principal fuerza opositora.

Días atrás el ministro de Hacienda, Pablo López, había asistido a una reunión con integrantes de las comisiones de Presupuesto tanto de la Cámara de Diputados como la de Senadores. En ese marco, les explicó a los legisladores que el objetivo de acceder a financiamiento externo era recomponer la relación entre recursos y financiamiento prevista en la Ley de Presupuesto 2023, para que vuelva a alcanzar el 2,5% en términos relativos frente a los recursos totales.

“Nuestra gestión ha mantenido una política de financiamiento responsable que nos permite dar respuesta a las necesidades de los bonaerenses a través de créditos a tasas bajas y plazos largos. El financiamiento previsto para este año está en niveles históricamente bajos; a lo que se agregó una evolución de las principales variables macroeconómicas por encima de todas las previsiones, provocando que, en relación a los recursos actuales, represente sólo el 1,9%", señaló López.

Concretamente, el pedido del Gobierno al Senado es la aprobación de un financiamiento (deuda) por $53.000 millones contraído en el mercado local "con el sólo objetivo de recomponer la relación entre financiamiento e ingresos provinciales".

Bolívar, en veremos

Tanto el no tratamiento de este proyecto como el retraso en la presentación del presupuesto provincial para el próximo año ponen en stand by las proyecciones que el intendente de Bolívar, Marcos Pisano, pueda hacer a nivel local. Es decir que sin la "hoja de ruta" que indique cuánto dinero enviará la Provincia a los municipios, difícilmente se puedan determinar los gastos e ingresos que tendrá la comuna en 2024.

Lo que sí es una certeza (siempre en caso de que el proyecto para que la Provincia obtenga financiamiento) es que el municipio podrá reprogramar para el 2024 la devolución de las deudas que contrajo en concepto de los Fondos Especiales de "Emergencia Sanitaria para la Contención Fiscal Municipal" y para poder pagar las sumas fijas que fueron otorgadas en los meses de septiembre y octubre a sus empleados.