Roque Gómez, uno de los responsables del ropero comunitario que funciona en la estación de trenes, publicó en sus redes sociales que durante la madrugada del miércoles personas entraron al galpón, rompieron muebles, desordenaron la ropa y se llevaron mercadería. "Fue daño, maldad y son personas que no están bien de la cabeza", afirmó el colaborador del lugar. 

"Triste noticia, me llamó la policía y una vez más los que no sirven para nada haciendo destrozo y rompiendo entraron al roperito comunitario de la estación", dio a conocer Gómez. El hombre lamentó que toda la ropa había sido acomodada para regalar a quien la necesita. "Así dejaron todo, mucha bronca, mucha impotencia, pero veremos las cámaras y si llego a saber quién fue, se va a enterar todo el pueblo", anunció desde su cuenta de Facebook.

La organización del ropero comunitario que funciona en uno de los galpones que hay en la estación de trenes, consiste en ubicar tablones en la parte de afuera para que quienes lo necesitan, puedan llevarse prendas de verstir. Roque y el grupo de personas que colaboran con la iniciativa habían estado en el lugar el martes y aprovecharon para acomodar la ropa. 

Quien o quienes ingresaron al roperito comunitario y cometieron el acto vandálico, entraron por una puerta de chapa que del lado de adentro tenía rejas. También había una estantería afirmada a la puerta, que la corrieron y tiraron para poder pasar.

Luego del llamado que recibió de parte de la policía, Gómez se acercó y vio que la puerta había sido forzadas. "No sé qué robaron porque no hay nada para que se roben, lo único que hicieron fue muchísimo daño porque desacomodaron, tiraron la ropa, ensuciaron todo y rompieron muebles que teníamos para dar", contó Roque a Bolívar Am. 

En el lugar había mercadería que al llegar Gómez no estaba. "No entiendo por qué hicieron lo que hicieron. Siempre decimos que lo que hacemos acá es de corazón y para darle a la gente, ayudar al que menos tiene. Seguramente ayudamos a algún familiar, un amigo, el hermano o la madre de quien haya sido, por eso nos da mucha impotencia", expresó el colaborador.

En el ropero también había una urna que se utiliza para recibir colaboraciones. Ese dinero se destina a pagar la luz e intenet del lugar para que funcionen las cámaras de seguridad. 

"Se ven algunas luces y vamos a tratar de mantenerlas hasta poder saber bien. La policía también está mirando todo para ver si podemos dar con los que hicieron el daño", indicó Roque sobre los videos que captaron las cámaras.

"Esto nos quita las ganas pero lo vamos a arreglar con más ganas, lo vamos a acomodar mejor si podemos y vamos a volver a dar función al roperito que ayuda mucho. Hay mucha gente que agradece de corazón", dijo por último Gómez.