Tasa vial: caída recaudatoria y lluvias evidenciaron el problema de los caminos rurales

Desde su implosión, la pandemia ha destapado problemas estructurales varios de la economía y Bolívar no ha sido la excepción. En el último mes, el municipio ha sufrido una brusca caída en su recaudación a través de las tasas municipales, una de ellas la vial, que desnudó en gran parte la deficiencia en la prestación del servicio.
Días atrás, el intendente Marcos Pisano presentó en la Sociedad Rural de Bolívar una nueva motoniveladora que adquirió el municipio mediante un crédito del Banco Provincia, tomado a principios de año. Allí, el llamado del gobierno comunal a que los productores abonen la tasa vial fue explícito, mientras que se comprometió a “trabajar sobre los sectores donde se está sacando el grueso de la cosecha”.
“Pedimos un poquito de paciencia a los productores y un ida y vuelta: que paguen la tasa vial y que estén al día”, resumió en su pedido la secretaria de Asuntos Agrarios, Lorena Carona, en la presentación de la máquina New Holland RG170B.
Los productores, por su parte, desde hace tiempo vienen reclamando por la situación de los caminos rurales y el consenso es casi unánime: la tasa vial no sería cara si se brindara un buen servicio.
“Tardan mucho en resolver problemas puntuales que capaz en un par de días ya podrían estar resueltos, la respuesta no es rápida”, consideró el titular de la Federación Agraria de Urdampilleta, José Umpiérrez, en conversación con este portal.
Por su parte, el referente de la filial Bolívar de la misma entidad, Eliel Nabaes, manifestó a PRESENTE: “El problema de los caminos rurales es crónico, venimos de muchos años sin mejoras visibles. Pasan la máquina y lo único que hacen es dejar más honda la calle”.
"Tardan mucho en resolver problemas puntuales"
Ambos, además de participar del ámbito político y gremial en representación del sector agropecuario, son productores de la zona de la Escuela 14, una de las más complicadas luego de las lluvias.
“Hay muchos lotes que se han complicado para cosechar, las mejores partes de soja están bajo agua y lo que podés sacar es lo más fulero”, describió Umpiérrez. A su vez, indicó que la situación de los pequeños y medianos productores “no es muy buena”. “Algunos no han podido sembrar por los costos, el que tiene algo de ganadería la está puchereando con eso y el que puede hacer algo de cultivo, si tiene suerte, lo puede vender y hacer algún manguito”, sostuvo el dirigente rural.
Al respecto, Nabaes coincidió en la afectación que sufrió la cosecha producto de las lluvias: “En sí, la cosecha se está dando con bastante normalidad, pero estas últimas lluvias nos trajeron complicaciones y hay zonas bastante anegadas. Estamos entrando en el invierno y va a costar que se vaya el agua, hay zonas en las que se va a perder la soja de segunda”, lamentó.